Nueva York.– Con la designación del próximo ministro de Agricultura el economista y productor agrícola Limber Cruz, hecha por el electo presidente Luis Abinader, este Lunes las avispas se han revoloteado en el Partido Revolucionario Moderno (PRM) tanto en la República Dominicana como en esta urbe.
El disgusto es tan grave que ya muchos miembros prominentes y dirigentes conocidos comenzaron a preparar tendencias para apoyar a quienes ellos esperaban fuera el designado de ese importante ministerio, como es el ingeniero Leonardo Faña, un hombre que según los disgustados, fue quien llevó la voz cantante ante el encontronazo con el ministro administrativo de la presidencia Ramón Peralta.
Un nutrido grupo de Agropecuarios que apoyan al ingeniero Leonardo Faña, dicen sentirse decepcionados con el presidente Abinader, al dejar fuera de ese ministerio a quien consideran la persona clave para ocupar esa posición, por ser muy cercano a él y sobre todo por el trabajo realizado durante la campaña tanto allá como aquí en nueva york, donde todos los movimientos de agropecuarios que se juramentaron, fueron esperando esa recompensa de ver a Faña, siendo el ministro de Agricultura.
El disgusto es mayor a sabiendas que el próximo ministro de esa cartera es un recomendado de Hipólito Mejía, lo que pone a pensar a muchos en el PRM y fuera, de que Abinader está siendo manipulado por el guapo de gurabo, como se comenta en círculos políticos y allegados al expresidente.
Dicen algunos de los quejosos de aquí, que el presidente Abinader, debe codearse con la gente que siempre ha estado cerca de él, porque serán quienes le cuidarán sus espaldas y lo ayudarán hacer un buen gobierno para así, en un eventual segundo mandato, poder contar con ellos como fieles seguidores.
El grupo de disgustados pidió reserva de sus nombres para evitar represalia y división dentro del PRM, además es muy prematuro buscar ese tipo de choque dentro del partido para no satisfacer el morbo de los opositores y que se piense que todos buscamos nombramientos y no el bienestar del país y una buena gestión de Luis Abinader.
Por Luis Pérez Febrillet
