New York.– La periodista dominicana Isolda Peguero fue una de las invitadas especiales del Programa Especial de la Cadena Telemundo en conmemoración del vigésimo aniversario de los atentados del 11 del 2001. Durante la transmisión presentada por José Díaz Balart y Arantxa Loizaga, Peguero narró en un reportaje especial lo vivido el 11 de septiembre, el día que cambió al mundo.
Además durante su intervención en vivo narró vívidamente cómo los eventos de ese fatídico día, marcaron su vida como periodista y neoyorquina. Isolda Peguero cuenta su historia del trágico atentado 9-11 20 años después por Noticias Telemundo.
Cabe destacar que la comunicadora Isolda Peguero con más de 35 años en una exitosa carrera en la comunicación en los Estados Unidos, donde ha trabajado en la televisión, la radio y periódico impreso. Isolda es respetada y querida por toda la industria en los Estados Unidos, permaneció por 25 años en la cadena Telemundo como corresponsal en la ciudad de New York, donde narró miles de historias.
Durante su presentación en un reportaje especial para celebrar los 20 años del trágico suceso del 911 dijo: “Tras haber evitado recorrer sus calles, hoy 20 años después he vuelto al distrito financiero de la ciudad de Nueva York tras los atentados del 11 de septiembre. Produce sentimientos encontrados, y trae recuerdos que siguen muy latentes y recrudecen con cada aniversario”.
“Es inevitable cada 11 de septiembre, viendo cómo en medio de una catástrofe desempeñamos nuestra labor de informar sin pensar en el peligro inminente que nos rodeaba; en mi caso, caminando durante horas en medio del caos, la lluvia de cenizas y los obstáculos de la confusión para llegar al lugar de los hechos mientras todos huían en dirección contraria. La capital del mundo se había convertido en una zona de guerra, los hospitales esperaban sobrevivientes que no llegaron. A pesar de lo inimaginable pude ver a los familiares buscando con fotografías a sus seres queridos. Porque ese martes soleado con un hermoso cielo azul, miles de personas salieron a trabajar y nunca más volvieron”, comentó.
- “20 años después donde hubo muertes, hay vidas. Un nuevo rascacielos es la mezcla imponente de la resiliencia de Nueva York que dice “aquí estoy”, finalizó diciendo en su reportaje.
La destacada periodista fue entrevistada por los conductores estelares de Noticias Telemundo José Díaz Balart y Arantxa Loizaga y dijo lo siguiente sobre sus vivencias y participación como corresponsal del trágico suceso.
“Definitivamente que a pesar de los años transcurridos por cada aniversario, recrudece el saber que esas icónicas torres gemelas, símbolo de Nueva York, se desmoronaron, convirtiéndose en un cementerio y, es por eso que ese monumento para las víctimas, es definitivamente tierra sagrada”.
“Yo recuerdo cómo me impactó muchísimo, como esas vidas se esfumaron en un abrir y cerrar de ojos, sin embargo los objetos personales como carteras, zapatos, papeles de oficina, quedaron intactos, y yo me digo a mí misma, ¡Dios mío, qué frágil es la vida! ¡Cuán efímera es! La vida se puede ir en un abrir y cerrar de ojos, sobre todo que las personas se me acercaban mostrándome sus fotos de sus seres queridos, cuando yo estaba tratando de ver si había sobrevivientes. Y ellos se me acercaban, desesperadamente, muchos no hablaban ni siquiera en inglés, yo tuve qué servirles de intérprete en ese momento; Telemundo se convirtió para nuestra audiencia como una especie de consolación para las personas, teníamos como el enlace con la comunidad, no solamente para que yo estuviera informando de lo que estaba ocurriendo en este país que nos había adoptado como residentes suyos, sino también para ayudar a buscar a sus seres queridos qué definitivamente los hospitales se quedaron esperando y nunca llegaron”.
“Es un día que yo caminé por horas para poder llegar a realizar mi trabajo, tuve que hacer malabares, e incluso cada policía que me desviaba yo buscaba un huequito para colarme, hasta que convencí a uno que me dejo pasar. Porque yo le decía, “si yo no llego al punto, al objetivo para transmitir esta noticia, mis supervisores no lo van a entender, porque todos están ahí”.
“Yo recuerdo que cuando llegue a mi casa casi a las 5 de la mañana, me di una ducha y empecé a sentir picor en todo el cuerpo y ahí me di cuenta que estaba bañada de cenizas; porque ese día azul radiante se convirtió en una lluvia de cenizas que llenó de oscuridad por muchos días a Nueva York, pero como podemos ver, aquí hay vida, sin embargo, todos los que viven aquí saben que hay vida y esperanza. Sin embargo los que vivimos aquí sabemos todo lo que ocurrió allí, y es imposible olvidar”.
“Definitivamente me marcó una madre con su hijo recién nacido en brazos y dos fotos que le habían captado en la primera navidad al recién nacido con su papá, y ella me lo vino a mostrar y me dijo, “ayúdame a encontrar a mi papá”. Y yo recuerdo que justo un momento después de eso yo no pude controlar el llanto, porque somos seres humanos”.
“Cuando comenzamos a ver todas esas fotos (que le pusimos nombre y apellido), había un sin número de personas que salieron a trabajar ese fatídico 11 de septiembre de 2001 y nunca más llegaron. Con cada aniversario me sorprende a mí misma cómo me afecta y cómo se me ha roto el corazón y se me hace un nudo en la garganta, porque fue demasiado grande lo que pasó, el peor atentado de la historia y como neoyorquina que vivía en esta ciudad, verme perdida, desorientada, no sabiendo dónde buscar informaciones; porque todos andábamos como zombies ese día”.
“Todos estábamos perplejos ante lo que ocurría frente nuestros ojos; fue tan doloroso para este país y el mundo, porque era una tragedia del mundo entero, por qué cambió el mundo entero”, finalizó diciendo Isolda Peguero.
Por José Zabala
